Una risa en la cara de alguien que debe mantener la seriedad que corresponde a un cargo público del que dependen más de 36 mil desempleados de la ciudad no es una risa, es una ordinariez.
Viendo los partes (que no noticias) de nuestra ciudad y la empalagosa relación institucional (últimamente, más estrecha) entre las alcaldesas populares de Jerez y Cádiz que aparecían sujetándose y riendo de forma distendida en nuestro Zoo, volví a entender por qué, junto a otras personas, instamos la constitución de Bases. La prensa cómplice no hace ni una sola pregunta inquitante; siempre complaciente con el poder político salvo si es de otro partido del que no recibe apoyo, información o subvención pública.
Porque el miedo a la falta de apoyo institucional de la administración pública por parte de los medios de comunicación (subvenciones) es vergonzante e indecente sino fuera porque da lástima respecto a los profesionales. Sólo hay que ver los políticos que tiene su espacio en determinados medios de información de la ciudad. El rincón del secretario general del PP en la provincia administrativa, el cuchitril del secretario local del PSOE con su articulito de opinión, la fotito de la alcaldesa inaugurando otro rótulo de una calle, la foto de familia en fitur de los dirigentes locales del PP, las múltiples informaciones de IU, del Foro, el veto vergonzante a BUX ... Lo dicho, da lástima el manoseo, toqueteo y abuso por parte de la política a la prensa que ha dejado de ser libre, independiente y veraz. Aquello tan lejano nos parece como la que se practica en las dictaduras de facto en Latinoamérica o la que se hace con la municipal (OJ), se practica a una escala inferior en nuestra ciudad de forma general. Pero todos queremos creer que no es así. Es más juraríamos que pensamos que no es así. Pues, lo siento. Es así. Como diría Dickens, en el pecado tienen su castigo.
Lo único esperanzador es la prensa digital que está comenzando a nacer a pasos agigantados. Es una prensa joven, quizás repetitiva, demasiado verde y con pocas calles pateadas, de agencias en muchos casos y de opinión en otros muchos, estéril e imberbe en su análisis político y que se deja llevar a aguas pantanosas en ocasiones o retoza en el barro porque la alcaldesa de Jerez les salude en su primer mensaje como medio de comunicación nuevo. No me gusta cuando la única publicidad común que suelen contratar es una promoción de viviendas del Ayuntamiento porque, ya se sabe, cobrar de lo público provoca servilismo. Pero ahí están, libres hasta hoy, comprometidos hasta siempre, que prometen no beber en el pozo envenenado de la publicidad viciosa que lleva a caer en el sueño eterno de una pesadilla política, retierativa, manipuladora y que al final se paga los favores.
Viendo los partes (que no noticias) de nuestra ciudad y la empalagosa relación institucional (últimamente, más estrecha) entre las alcaldesas populares de Jerez y Cádiz que aparecían sujetándose y riendo de forma distendida en nuestro Zoo, volví a entender por qué, junto a otras personas, instamos la constitución de Bases. La prensa cómplice no hace ni una sola pregunta inquitante; siempre complaciente con el poder político salvo si es de otro partido del que no recibe apoyo, información o subvención pública.
Porque el miedo a la falta de apoyo institucional de la administración pública por parte de los medios de comunicación (subvenciones) es vergonzante e indecente sino fuera porque da lástima respecto a los profesionales. Sólo hay que ver los políticos que tiene su espacio en determinados medios de información de la ciudad. El rincón del secretario general del PP en la provincia administrativa, el cuchitril del secretario local del PSOE con su articulito de opinión, la fotito de la alcaldesa inaugurando otro rótulo de una calle, la foto de familia en fitur de los dirigentes locales del PP, las múltiples informaciones de IU, del Foro, el veto vergonzante a BUX ... Lo dicho, da lástima el manoseo, toqueteo y abuso por parte de la política a la prensa que ha dejado de ser libre, independiente y veraz. Aquello tan lejano nos parece como la que se practica en las dictaduras de facto en Latinoamérica o la que se hace con la municipal (OJ), se practica a una escala inferior en nuestra ciudad de forma general. Pero todos queremos creer que no es así. Es más juraríamos que pensamos que no es así. Pues, lo siento. Es así. Como diría Dickens, en el pecado tienen su castigo.
Lo único esperanzador es la prensa digital que está comenzando a nacer a pasos agigantados. Es una prensa joven, quizás repetitiva, demasiado verde y con pocas calles pateadas, de agencias en muchos casos y de opinión en otros muchos, estéril e imberbe en su análisis político y que se deja llevar a aguas pantanosas en ocasiones o retoza en el barro porque la alcaldesa de Jerez les salude en su primer mensaje como medio de comunicación nuevo. No me gusta cuando la única publicidad común que suelen contratar es una promoción de viviendas del Ayuntamiento porque, ya se sabe, cobrar de lo público provoca servilismo. Pero ahí están, libres hasta hoy, comprometidos hasta siempre, que prometen no beber en el pozo envenenado de la publicidad viciosa que lleva a caer en el sueño eterno de una pesadilla política, retierativa, manipuladora y que al final se paga los favores.
Qué sería si la prensa local o nacional fuera libre. Qué lugar más bello para vivir. La información transmitiría verdadera libertad, la necesaria para decidir. Y sería esa misma libertad de información la que permitiría subsistir a los diarios en tiempo de crisis. Justamente lo que no está ocurriendo hoy en día. Y es que al final, la limosna subvencionada, es la manzana envenenada que te mata poco a poco.
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