Análisis poselectoral: Pacheco. El voto del miedo



Voy a comenzar por el final. Y lo último que conozco de este partido es que su lider se encontró a Pepe Cirera -para el que no le conozca historiador local- en la biblioteca municipal y, en mala hora, este le comentó "Pacheco ¿dónde está el pendón?". La respuesta del nuevo diputado provincial fue evasiva pero ante la insistencia curiosa e ingenua del historiador Pacheco comenzó a gritar y a exteriorizar movimientos y expresiones no reproducibles.

Este hecho, representativo de la vida social y cultural de Jerez, nos muestra la clara línea divisoria y el enfrentamiento latente entre la política y la cultura en Jerez. Quizás por ello está como está el museo arqueológico, el pendón histórico desaparecido y, en general, la vida cultural de la ciudad es tan deprimente y escasa.

Si soy sincero el partido Pacheco ha sido la sorpresa de estas elecciones. Muy a mi pesar he de reconocer que, aunque las encuestas adelantaron algo, yo pensaba que en el mejor de los casos sacarían dos concejales y, sin embargo, obtuvieron cuatro. Seguramente este nacimiento exitoso del partido Pacheco tenga que agradecerle muy mucho a Pilar Sánchez y su mala gestión en los cuatro años de mayoría absoluta. Fue tan mala cara la que presentó el PSOE como buena la que adquiría el mandato de Pacheco conforme se derrumbaba Jerez. Pacheco llegó a bromear incluso sobre la necesidad o no de hacer campaña electoral. Y no le faltaba razón. Otros la habían hecho por él.

Cuando se habla de personalismos en política de Jerez se habla de Pacheco. Este partido, como ya escribí hace algún tiempo, tiene la imagen pública de estar formado y compuesto sólamente por una persona, su lider, Pacheco. Los demás candidatos eran meros figurantes, ignorados por todos además de por los propios creadores de la formación Foro ciudadano. Hasta tal punto es así que ayer saltó a la opinión pública que Carmen Torres -su cuarta cabeza de lista- está dispuesta a salir del partido pero conservando su acta de concejal en el grupo de concejales no adscritos. Curiosamente esto nos lleva a preguntarnos, ¿a quíen votó el electorado? ¿A Pacheco, a su partido Foro Ciudadano o a la candidata Carmen Torres? La respuesta a la pregunta se responde con lo que afirmé antes, los demás candidatos eran meros figurantes y el partido se llama Pacheco.

Si los votantes de B.U.X. votaron algo nuevo por conocer, con el riesgo implícito que lleva  apostar por el que emprende y es nuevo, los votantes de Pacheco votaron por miedo. Sí, miedo. Cuando uno vota conservador, vota a "lo malo conocido". Por miedo a lo que vendrá. Por miedo a lo que hay permanezca. Miedo por lo nuevo. No es casualidad que el mensaje publicitario electoral fuera "Garantía", retrotrayéndose al pasado. Y sí, la gente en temas económicos -y el que gestiona el ayuntamiento gestiona nuestro dinero-, como la banca o el empresariado lo és en lo suyo, suele ser conservador, atenazado por el miedo a perder.

Luego están los rumores y los hechos. Sobre este partido en campaña ha habido muchos y variados rumores. Desde que los que pegaban los carteles cobraron cien euros por noche o 500 euros por toda la campaña, o que los interventores y apoderados también recibieron su "peoná" a la finalización del domingo electoral -100 euros decían- o que Pacheco compraba votos prometiendo contratos en el ayuntamiento. Esos rumores (que he escuchado reiteradamente) pueden o no ser verdad, en todo o en parte. Lo que sí es verdad es que varios interventores de este mismo partido hacían desaparecer las papeletas de los otros partidos o repartían papeletas electorales a la puerta de los colegios electorales. En la zona sur incluso hubo varios incidentes más o menos graves. 

Si después de más de 20 años en el poder, endeudar a la ciudad como lo está, enchufar a media plantilla del ayuntamiento, salir corriendo cuando fue elegido como concejal y pactar con el mismísimo diablo Pacheco ha conseguido 4 concejales, algo tiene que tener. Aunque me cueste admitirlo y esté en el mayor desacuerdo con las personas que lo votaron, no puedo dejar de reconocer que el carisma de Pacheco en Jerez es enorme, sus contactos son extensos y anda sobrado de dinero. Se ha convertido ahora -tras tantos años en el poder- no en una solución, no en un referente político, no en alguien de confianza, sino más bien en un recuerdo endulzado por algunos jerezanos a los que aferrarse en tiempos difíciles. Un recuerdo que siempre amaga con volver porque el ego no le permite mirar el sillón de alcalde desde otro lugar del pleno municipal. El mismo ego que le hace huir cuando no consigue lo que quiere. El mismo que ahora le lleva a diputación y pone en el salon de plenos del ayuntamiento a figurantes llenos de incógnitas pero con las manos vacías de poder y dinero. El que le hizo gestionar tanto retoque con el photoshop. Ese ego que tanto perjuicio ha provocado en Jerez. El mismo que tanto seguidor le ha atribuído en Jerez. Y tanto detractor.

Para terminar su imagen imborrable de estas elecciones. La noche del recuento aparece sin careta y desatado físicamente. Nubes negras tiñen aquellas declaraciones de sombras muy oscuras. No sé lo que pensarían sus votantes al ver aquellas imágenes o escuchar las declaraciones. Supongo que alguna duda les importunarían en la cabeza aquella noche. Yo, por mi parte, me pregunté si realmente Jerez tiene lo que se merece. La respuesta fue afirmativa.