Los partidos políticos locales, tienen bien aprendida la lección. Una lección que les ha sido beneficiosa mucho tiempo, tanto que Jerez está ahora en la más absoluta quiebra.
La lección que los partidos políticos locales tienen aprendida es el clientelismo. O lo que es lo mismo, prometer un beneficio particular al vecino o grupo de vecinos para tener algo concreto que pueda cambiar por sus votos. Así el vecino se convierte en el cliente del político, pagando con su voto el favor público.
Esta forma de proceder se da mucho en nuestro término municipal. Lo vemos diariamente en la prensa. Por ejemplo en la promesa de legalización de las viviendas de Puente de La Guareña, Majarromaque, Torremelgarejo y Gibalbín que hizo el partido Pacheco. Ese clientelismo se manifestó también ante la comunidad de vecinos de los pinos, ante los cuales el mismo partido Pacheco prometió el solar en el que se encuentra al lado del elefante azul, que tenía previsto ser sede de un organismo oficial.
Clientelismo es también anteponer una medida que todos saben que es perjudicial para el término municipal como es "el mantenimiento íntegro de la plantilla municipal" -IU, PACHECO, PP, UPyD ...- por no perder ninguno de los votos de los empleados públicos ni de sus familias -que pueden ser sobre los 4 mil votos-. Y es que el clientelismo basa su criterio en imponer un fin particular (el del cliente y el del político) sobre un fin general (el del término municipal y su ayuntamiento).
Este beneficio particular y este interés particular están instaurados en la sociedad jerezana como uno de sus principios básicos. Y créanme, hay que cambiarlo. Es tan perjudicial el clientelismo como ver algunas peñas flamencas en Jerez con un alto grado de ostentación y sin embargo estar rodeadas de un sin fin de casas marginales y casi en ruinas.
B.U.X. perderá votos en muchas de sus medidas, seguro. Pero lo que está claro es que esas medidas no se basarán en un interés particular ni en el clientelismo retrógrado que la política de Jerez sigue instaurando en la ciudad.
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