En Jerez o cobran poco o cobran tarde o no cobran, todos los jerezanos. Este axioma de tres principios genéricos supone una auténtica realidad para la vida diaria de Jerez y sus ciudadanos. Bueno, este axioma tiene sus excepciones. Por ejemplo la de la lider del PP local Maria José García Pelayo que cobra como senadora puntualmente. Y no me extraña que se agarrara al sillón de senadora con todas sus fuerzas sabiendo que era la mejor manera de seguir chupando de las arcas públicas sin tener que rendir cuentas a los sindicatos locales o a los trabajadores del ayuntamiento o a los ciudadanos en desempleo.
Dicho lo cuál dejo constancia para desmentir noticias que no son del todo ciertas de lo que dispone en Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General. Su artículo 158.1. manifiesta que en cualquier caso, los Diputados y Senadores no podrán percibir más de una remuneración con cargo a los presupuestos de los órganos constitucionales o de las Administraciones Públicas ... sin perjuicio de las dietas e indemnizaciones que en cada caso corresponda por los compatibles". Es decir, Pelayo solo puede cobrar un sueldo y, en este caso, es el del Senado. Ello pese a que no aparezca por Madrid y cobre dietas.
Porque lo de las dietas es para hacérselo mirar. Un senador que no proceda de la comunidad de Madrid como es el caso de Pelayo aproximadamente recibe mensualmente unos 4.948,55 euros (69.279,7 al año, más dietas -recordemos que por ley el sueldo de los primeros ediles estaba limitado a unos 67 mil euros al año-). Lo más curioso es que existe una dieta para gastos de alojamiento y manutención para los elegidos fuera de Madrid.Esta dieta es como un 'segundo salario' que gira en torno de los veinte mil euros al año y además se trata de una cantidad "exenta de tributación". Por otra parte se encuentran los "complementos mensuales por razón del cargo": presidente de Comisión (1.431,31 euros al mes), portavoz de Comisión (1.046,48), etc. Incluso tienen ayudas se extienden asimismo al transporte (0,25 euros por kilómetro en caso de usar el propio automóvil y una tarjeta con un límite de 3.000 euros al año para moverse en taxi).
En conclusión. Cuando por ley Pelayo solo puede cobrar un sueldo público hay dos posibilidades. O bien te quedas con el que te da el Ayuntamiento que sabes que no supera los 67 mil sin las dietas que te da el otro, que vas a tener que justificar permanentemente ante los ciudadanos que no cobran o están en desempleo y además tributar por todo o bien te quedas con el de senador que ronda los 70 mil al año, con elevadas dietas, recibiéndolo puntualmente y sin que dependa de un ente local en bancarrota... obviamente aunque solo sirva para eso se queda con el de senador.
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